He visionado muchos vídeos de otras
personas sordas que hablan del espiritismo.
¿Por qué se habla del espíritu de
los muertos y no de los vivos?
Hablaremos del espíritu, del alma,
de la vulgaridad plebeya de creer en su existencia.
El espiritismo se inició en Francia
en el año 1850 con el Libro de los Espíritus, de Allan Kardec y pasó a los
Estados Unidos donde se mezclaría con creencias, misticismo y espectáculo.
De ello se deriva los médiums,
bastante recurrente en las películas, y eso significa una supuesta facultad de
la que disponen para ponerse en contacto con las personas ya fallecidas u otras
entidades en otros planos o realidades.
El espiritismo está principalmente
asentado en el Esoterismo, que han convertido en un canal de frecuencia a
través del cual se recibe, supuestamente, información espiritual, que implica
una supuesta comunicación telepática.
Los médiums son actualmente
desacreditados por investigadores de diferentes especialidades como Harry
Houdini, Carl Sagan, Michael Shemer y James Randi.
Lo mismo que el Tarot, que data del
año 1412, siglo XIV, es una simple baraja especial de 78 cartas que un lector
las interpreta de acuerdo con el orden
en que son seleccionadas o repartidas.
La mentira está patente en que
suelen dividir ls cartas en dos grupos: Arcano Mayor y Arcano Menor. La palabra
arcano significa misterio o secreto.
Solamente empezaron a ser usadas
como misticismo y la magia en el año 1781 por Antoine Court de Gébelin, clérigo
suizo y fracmason.
Usan las mismas técnicas que los
supuestos adivinos, son muy buenos fisonomistas que se aprovechan de sus
conocimientos para sacar dinero a los crédulos.
Sólo en España el esoterismo
mueve cientos de millones de euros al año, siendo el tarot el elemento más
visible y comercial.
Todo se relaciona con la pseudociencia, que
es una afirmación que se presenta como supuestamente científica pero que no se
basa en un método científico válido porque le falta el apoyo de evidencias y no
puede ser verificada de forma viable.
Es presentada de forma intencionada con
fines especulativos y además es demasiado dogmática porque sus principios están
planteados en términos tales que no admiten refutación. Lo contrario de la
ciencia que sí permite la precisión.
Los sinvergüenzas, los tramposos, los
embusteros, los charlatanes, etc. se aprovechan de determinado sector de la
población mundial para sacar provecho de la ignorancia.
Muchas veces son las propias víctimas las
que cuentan cosas que el supuesto mago aprovecha para guardarlas y en otra
visita le suelta un montón de mentiras entrecaladas con lo que antes le dijo la
propia víctima. Así crean el efecto de que es adivino.
En los Estados Unidos y países de
América Central y Sudamérica, están muy extendidos los chalanes y quiromantes,
todos unos sinvergüenzas, que se aprovechan de la credulidad del pueblo
ignorante para sacar provecho.
Los espíritus NO EXISTEN, tampoco lo
que dicen ALMA, ambas cosas son filosóficas y provienen del pensamiento humano
del que sacan provecho otras mentes más despiertas para sumir en el miedo al
resto de personas.
El primer embustero, si creemos lo
que dice la Biblia y el Nuevo Testamento, sería Jesucristo, aunque antes hubo
otros muchos. Son los llamados profetas.
Las distintas iglesias (católica,
protestante, baptista, musulmana, judáica, hindú, etc.) hacen frecuente uso de
esa filosofía del miedo para hacer creer a la gente cosas que no existen ni han
existido nunca.
Se basan en la facilidad de los
crédulos que NO CREEN LO QUE VEN y sin embargo CREEN EN LO QUE NO VEN. Toda una
contradicción.
La ciencia (del latín scientĭa
'conocimiento') es el conjunto de conocimientos sistemáticamente estructurados,
y susceptibles de ser articulados unos con otros.